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LÓPEZ 2 Una vida de perros

López se cansa de su vida casi humana, de salir de compras, del baño con champú y de mirar la tele. Un día, corre sin parar, en busca de una vida de perros, como la de Cartucho. Pero descubre que no tiene ni idea de lo que es una auténtica vida de perros y, entonces, cansado de ser un perro "callejero", decide volver a casa de los Gil. ¿Qué le esperará a López a su regreso? En este libro, López aprenderá que algunas decisiones no tienen vuelta atrás, pero también, que siempre se abren puertas a otros mundos.

A DESTRUIR EL MUNDO! - Atlántida

Escrito por Fernando de Vedia. ¡Ahora podés ser parte de un plan malvado para destruir el mundo! Lápices de colores, crayones, témperas, tijeras, pegamento, pinceles y lapiceras serán tus mejores armas para terminar con nuestro planeta. Un libro de Fernando de Vedia en el que los chicos descubren, con el antiejemplo, que atacar al medio ambiente es como lastimarse a uno mismo. ¡A destruir el mundo!” Es una opción diferente y divertida para pensar de qué hablamos cuando hablamos de ecología.

SOFRANKA Y EL OJO DEL FARAÓN TUERTO - Huaca Ediciones

Escrito por Fabián Sevilla. Hay personas con un solo ojo; por ejemplo, los piratas o los cíclopes. Y aunque haya muchos que accidentalmente perdieron uno o ambos ojos, no por eso están obligados a dedicarse a la piratería o son monstruos mitológicos. ¿Por qué les hablo sobre esto, queridos lectores? Porque deseo contarles sobre Sofranka Sujamí. Ella no tenía un único ojo. Tampoco miraba a través de un par de ojazos. No. Sofranka tenía…Así comienza nuestra historia, la de Sofranka Sujamí y su caravana de los Fenomenales Fenoménicos. Una historia divertida sobre una mujer capaz de adivinar lo inadivinable y su caravana de gente diferente.

¡TIENE CORONITA! - Huaca Ediciones

De Adela Basch y Fabiana Margolis. Dos historias donde hay palacios, torres enormes, reyes y todo tipo de comodidades. Una es la historia de un príncipe, Joaquín, y la otra es la de una princesa, Brillantina. Ellos no se conocieron pero podrían haber sido muy buenos amigos. Son dos hijos reales pero también son dos niños a los que les gusta jugar como a cualquier otro, festejar sus cumpleaños, y que los adultos los tengan en cuenta. De eso se tratan estas historias: de dos niños que tienen coronita pero que no la quieren.

BLAD STRUJEN, UN VAMPIRO DE TU EDAD - Huaca Ediciones

LÓPEZ - EDITORIAL QUIPU

Escrito por Silvina Rocha. López es un perro bien de su casa, mira telenovelas con su dueña, sale a hacer las compras, usa piyama para dormir, corbata para pasear y come comida dietética para perder peso. La vida de López en la casa de los Gil, sus dueños, parece casi perfecta, hasta que conoce a Cartucho. Un perro bien perro, con una auténtica vida de perros. ¿Qué le pasará a López cuando descubra que existe una vida tan distinta a la suya? Una historia en donde su autora, Silvina Rocha, indaga en clave de humor sobre la humanización de las mascotas y el respeto que en verdad merecen.

CECILIO NO CONCILIA EL SUEÑO - Pequeña Aldea

Escrito por Alejandra Erbiti. ¿A alguien realmente le funciona el clásico método de contar ovejitas para atraer el sueño? ¡A nadie! Y a Cecilio menos que menos. Toda la noche desvelado, sin velas de barcos ni velas de luz. Pero por suerte un gran conocedor de los misterios del sueño le da la solución. Porque para preparar la más efectiva receta contra el insomnio solo se necesitan unos pocos ingredientes fáciles de conseguir: unas ovejas díscolas y desordenadas, una charla filosófica, unos gatos somnolientos, unas orejas bien limpias, un suelo cuadriculado y un improvisado juego entre dos pésimos competidores. Se revuelve, se cocina y ¡listo el sueño!”

EL PARAGUAS QUE HACÍA LLOVER - EDICIONES ABRAN CANCHA

El paraguas que hacía llover: seis fábulas de objetos, animales y personas Emilio Saad Ilustraciones de Cucho Cuño Colección Caballo Rayo 14 x 19 cm. / 40 págs. En la vida de los objetos, los animales y las personas hay cosas fabulosas, impensadas, asombrosas. Como un paraguas generoso de agua que va lloviendo cada vez que se abre. Como un televisor que quiere mirarse y un chico que no quiere ver televisión. Como un perro que, con la exactitud de un reloj, da la hora. Como un gato que camina por los techos de adentro de la casa. Como una lora con la talentosa voz de una diva de ópera. Como una rana que sueña con ser la mascota de unos mellizos y pasear a los saltos por la vereda.

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